Banpiros y vamqueros con calcetines

Gracias a mi mujer la entrada a mi imbécil blog ha tenido un firme candidato.

Un año más se dan los premios IgNobel que concede la revista AIR. Se premian a investigadores e investigaciones que  “hacen reír, y después pensar” que nos están tomando el pelo o que son muy tontos, muy tontos, algunas veces, de lo listos que son. Es como si la inteligencia llegara a un nivel en el que se diera la vuelta y se volviera tontuna. Viene a ser como ese estudio del CSIC sobre los dragoncillos, que estaba a la altura de todo este asunto. O a lo mejor son tan listos, listos, que nosotros no podemos ver esa inteligencia de lo tontos que somos y ellos se ríen así a lo bajini con una mirada de menosprecio y luego viene un puño y les salta las muelas.

Este año se lo han llevado varios grupos de científicos cachondos o muy tontos (o muy listos) en las diez  disciplinas que optan a los antipremios. Entre ellos el de Física me ha parecido el más mejor y más útil. Se lo ha llevado el equipo que lidera una mujer llamada Lianne Parkin. El artículo por el que se ha llevado el premio fue: “ Preventing winter falls: A randomised controlled trial of a novel intervention”. Para los que no sepan inglés, el traductor de elmundo es muy bueno. Según este traductor, el título es: “Prevención de caídas de invierno: Un randomised controló la prueba de una intervención nueva”. Todo más claro.

El resto de premios son variopintos, al igual que el titular de elpais.com que bien se podría llevar el premio al titular más cachondo de la semana pasada. 

"El sexo entre vampiros y los banqueros de Lehman Brothers, entre los premios Nobel alternativos" (¿Ande’s tá la coma, aquí o aquí? ¿Ande’s tá la coma? ¡Tachín!)

Pues no hay coma. Pero no haría falta. Pero, amigos, yo he interpretado muy bien el titular y viene a decir: “La zoofilia grotesca y asquerosa de los hermanos Lehman, esos pervertidos, se lleva un premio Nobel alternativo”. Subtitular: “Los muy guarros, hacerlo con muerciésgalos cuando hay ovejas más bonicas o, en su defecto, ponys”. Pero no es a lo que voy.

Survival socks

El elpais.com confunde vampiros por murciégalos o ratas del aire, cuando los murciégalos o chupan nucas o beben nectar. Me dirán: “Tu estás tonto”. Y les daré la razón. Pero (hoy hay muchas frases que empiezan por “pero”, y muchas “comillas”, veo), como digo, el DRAE es claro:

(Del fr. vampire, y este del al. Vampir).

1. m. Espectro o cadáver que, según cree el vulgo de ciertos países, va por las noches a chupar poco a poco la sangre de los vivos hasta matarlos.

2. m. Murciélago hematófago de América del Sur.

3. m. Persona codiciosa que abusa o se aprovecha de los demás.

En la definición 3 (la uno tampoco tiene desperdicio) ya se ve por dónde van los tiros. Banqueros… Personas codiciosas… ¿Lo ven? ¿Es que estoy loco? ¡¿Es que estoy loco?! ¡¿Dónde está mi medicina?!

Pero una persona desequilibrada como yo no podía quedarse aquí y he investigado a Lianne Parkin y el artículo por el que le han dado el premio, ya referido antes. Lo pueden leer aquí. De nuevo el traductor de internet  consabido juega un papel muy importante en esta entrada del blog. Traduciré directamente las conclusiones.

“A pesar de alguna incertidumbre residual científica, debido a la alta frecuencia de caídas relacionadas con el hielo en nuestra población, la naturaleza barata y simple de la intervención de calcetines-sobre-zapatos, y la ausencia de daño físico (de correctamente ser encajado), nos sentimos inspirados unir a un profesor eminente, ella misma un defensor a largo plazo de calcetines, en la adopción de esta práctica este invierno.

 Intereses que compiten: Ninguno sabido. En particular, ninguno de los autores tiene eslabones financieros con fabricantes de calcetín y ninguno de nosotros posee la oveja.”

"(...) y ninguno de nosotros posee la oveja." Revelador.

Ya, más en serio, diré que el artículo es una pasada de guapo. El estudio se hizo en Nueva Zelanda a treinta personas de diversas edades a los que pusieron a andar por diversas calles heladas con pendiente y se pretendía “Investigar la hipótesis de que llevar calcetines sobre los zapatos mejora la tracción sobre senderos helados”. Los calcetines eran de colores. Todo para llegar a la siguiente conclusión, como ya saben: “Llevar calcetines sobre zapatos parece ser un método eficaz y barato de reducir la probabilidad de deslizamiento sobre senderos helados”. Premio merecido. Sin duda.

Aquí iría el dibujo de un grupo de asalto militar equipado con la más alta tecnología de un país ahora en crisis. “Dios mío, ¿me cago en todo incluída la puta, qué mierda llevan puestos los vehículos de asalto, soldado? El soldado mira los neumáticos y dice: “Mi general, los ha hecho mi madre. Son de lana. ¿No le gusta el color?”. “¡Quite de inmediato esa mierda, soldado!”. “Pero es que si los quitamos, los coches se deslizan por la cuesta, mi general, y nos vamos todos a la mierda. Es lo que tiene atacar Nueva Zelanda”. El general reflexiona un momento y decide subirse a una montaña rusa cercana para ver si le quita de una vez el dichoso asma.

Es lo que hay. Gracias y adiós.