miércoles, octubre 22, 2008

El trigo también puede opinar

Uri Geller lleva siempre una cucharilla en su coche”. Este, creo, debería haber sido el titular de la “noticia”. Parece que Uri “ayuda” a Hamilton en sus carreras… Sí, he comenzado fuerte. Demasiadas comillas llevo.



«Un día iba con mi mujer conduciendo cuando vi a Lewis en una esquina, junto a un amigo que resultó ser un rapero famoso (Pharrell Williams). Soy un gran fan suyo, así que paré el coche y estuvimos charlando. Le hice el truco de la cuchara y cuando la doblé se quedó loco. Intercambiamos los móviles y ahí comenzó nuestro trabajo».

Se han dado cuenta, ¿no es así? El amigo Uri llevaba por “casualidad” una cucharilla y le enseñó el truco a Hamilton.

Aquí iría el dibujo de un policía que está esposando a Uri Geller. Su cara en el capó del coche, una rodilla en la nuca. Otro policía retiene a una multitud de indigentes alocados. “¡Nos ha doblado todas las cucharas, ese maldito hijo de perra!”, dice la voluntaria del comedor social. “¿Ahora cómo vamos a tomarnos nuestra sopa?”, pregunta uno de los indigentes que quiere zurrar de lo lindo al ilusionista.


Esta noticia no hubiera sido igual, como me decía ayer mi mujer, si esta gente se hubieran sacado el título de Filosofía y Letras, Filología Hispánica o algo por el estilo. ¡Qué cabrones! Se van a por los buenos, ¿eh? Hay que ver… Si es que los otros no los quiere nadie ni regalados.

El genoma del trigo es cinco veces el humano”.

Aquí iría el dibujo de un campo de cultivo donde dos plantas de trigo conversan amigablemente. “¿Cuándo van a dejar estos cabrones de hacer pan con nosotros?”, pregunta una en un momento dado. “No. La cuestión es: cuando vamos nosotras a dedicir hacer pan con ellos”, advierte la otra. Y no le falta razón.

Y esta noticia nos advierte de que nosotros teníamos razón y ellas han de callarse de una vez. El nuestro es más grande que el suyo, sí, y por eso, sin lugar a dudas, comportarnos como gilipollas nos requiere mucho más esfuerzo del que ellas imaginaban. ¡Ja!

3 comentarios:

Plyngo and Me dijo...

Hola Cifuentes, te mando este mensaje para avisarte de que, en breve, estarás agregado en mi blog, muchas gracias por tu visita y prometo regresar por acá.

Un saludo, por cierto, tienes un blog genial.

Ocho dijo...

Ya habia oido yo rumores del ataque de los trigos vivientes en los suburbios y partes traseras de las panaderias, sisi.

Empezaron atacando con esas mierdas de baguettes venidas a menos, y ahora planean un ataque masivo a la humanidad.

¡Temblad malditos!

Sr. Sin Culo dijo...

Yo no lo hubiera descrito mejor, señor Ocho.

En Antequera tenemos unos jodidos "panecillos" aplanados que pronto pillan moho y se ponen duros. Son unos cabrones de aúpa. ¡Yo os maldigo, molletes! ¡Os maldigo!

Un saludo a Plyngo. Gracias por pasarse por mi humilde rinconcito con vistas a un campo de girasoles.